Por Luis Sellán.
Sin
lugar a dudas el 17 de octubre de 1945 cambió la historia argentina, además de
ser el día icono de la historiografía peronista, es una fecha bisagra, dónde a
partir de ahí todo cambió. Una multitud de obreros, principalmente del
sur del conurbano bonaerense desde Berisso -kilómetro 0 del peronismo-, cruzan
el riachuelo hacia la plaza de mayo a exigir la libertad del coronel Perón. Una
figura emergente que, desde una ignota secretaría de trabajo y previsión
durante la dictadura germanófila del GOU, empieza a desempolvar viejos
proyectos de ley socialistas y con ello cumplir antiguas y postergadas demandas
obreras.
Mucho
se ha dicho sobre esta emblemática fecha: ¿Quién hizo el 17 de octubre?, fue
Cipriano Reyes, fue Evita, o lo hizo el pueblo espontáneamente.
Fue la fecha insignia del
peronismo, a veces más recordadas que otras; en esas otras; moderadamente
escondido- “mejor no hablar tanto del 17”. Hoy, la encuentra con un peronismo
derrotado de la peor manera y que se parece a una veleta perdida y a borde de
naufragar.
En su libro “Raúl Aphold, el inventor del peronismo” (1): la escritora Silvia Mercado- lo recomiendo como lectura para entender una visión del peronismo - dice: “El 17 de octubre fue el primer mito construido desde el aparato de comunicación del gobierno, a instancias de Perón”-P/137-OP Cit.
Para la CGT, según el precitado libro y otros investigadores el
día elegido fue el 18 de octubre, cuando decretaron un paro nacional. Sin embargo,
para Perón estaba claro que su “toma de la bastilla” debía
ser el 17, y que no estaba dispuesto compartirlo con los sindicatos.
En 1946 el diputado y director del diario peronista La Época, Eduardo Colom,
conjuntamente con el dirigente sindical Cipriano Reyes; quien en un recordado
libro se adjudicó tan emblemática fecha, presentaron un proyecto para promover
el 17 de octubre cómo el día del pueblo y feriado nacional.
Perón todavía, recién asumido, no tenía el monopolio del significado del 17 de octubre. Se hizo un acto donde habló Cipriano Reyes y la Alianza Libertadora Nacionalista puso una ofrenda floral en forma amenazante en la sede del diario Crítica, el acto culminó con un discurso del propio Perón.
Pero como se había señalado anteriormente Perón no tenía interés en compartir la fecha con los trabajadores y con nadie, el 17 de octubre fue transformándose paso a paso del día del pueblo y los trabajadores en el día de la lealtad a Perón.
En 1947 el Partido Laborista (2) pretendió repetir un acto similar, pero fue levantado por “mal tiempo”, sería el último intento de Cipriano Reyes de disputar el significado del 17 de octubre, en 1948 fue detenido acusado de complot y borrado de la historiografía peronista para siempre, permaneciendo en la cárcel hasta 1955.
“En 1947, los diarios peronistas, tampoco mencionaron el rol desempeñado por la CGT durante el 17 de octubre” “(…) en 1948 se dio el gran salto cualitativo en materia de comunicación, se creó el comité organizador de los eventos del 1 de mayo y el 17 de octubre, integrados por el ministro Oscar Ivanisevich (3), José Espejo (4) y Raúl Aphold(5), a partir de aquí estas fechas – y en especial el 17 de octubre- tuvieron el carácter que a Perón le gustaba”, de absoluta lealtad a su persona. Pág. 139- óp. cit.
De
este modo el peronismo creaba para su propia mitología la fecha emblemática de
su constitución como movimiento político, donde la lealtad y obediencia a Perón
iba a estar por sobre todas las cosas, nada ni nadie podía sobrepasar esa
lealtad. Fue Aphold, jefe de Comunicación y cerebro de la política
propagandística del peronismo el que ideó además la fórmula que fuera Eva Perón
la conductora del 17 de octubre.
Entender la transmutación de la fecha emblemática del peronismo es probablemente la primera punta para entender este movimiento que ha hecho de la acumulación de poder, el pragmatismo y la obediencia del que conduce –hasta que detenta el poder- el sustento fundamental de su propia existencia.
Ni “un peronismo sin Perón” ni la “patria socialista” a través del peronismo podían funcionar en un movimiento bajo este esquema de poder.
Entender la transmutación de la fecha emblemática del peronismo es probablemente la primera punta para entender este movimiento que ha hecho de la acumulación de poder, el pragmatismo y la obediencia del que conduce –hasta que detenta el poder- el sustento fundamental de su propia existencia.
Ni “un peronismo sin Perón” ni la “patria socialista” a través del peronismo podían funcionar en un movimiento bajo este esquema de poder.
CIPRIANO REYES
1). Raúl Ahold- El inventor del Peronismo. Silvia Mercado- Editorial Planeta- 2013.
(2) Partido con el que se presentó a las elecciones de 1946 el Gral. Perón. A partir de 1948 cambió su nombre por el de Partido Peronista.
(3). Ministro de educación de Perón- 1948/1955 y de Isabel Perón 1974/7975. Hombre de derecha vinculado en la última etapa al lopezrreguismo.
(4) secretario general de la CGT- 1947/1952.
(5) secretario de comunicaciones y propaganda de Perón. Vinculado al negocio del espectáculo y los medios de la época.
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